Violentadas en Cuarentena:
mirar hacia adentro
La pandemia de covid-19 nos obligó a quedarnos en casa, a estar adentro. Y ese mirar hacia el interior llevó a un equipo de 66 personas entre periodistas, factchekers, diseñadoras, ilustradoras, traductores y realizadoras a colaborar en Violentadas en Cuarentena, una investigación transfronteriza y regional que recopila y analiza datos de 19 países de América Latina y el Caribe sobre cómo se presentó la violencia contra las mujeres por cuestiones de género durante las medidas de aislamiento social, que impusieron los gobiernos para contrarestar los impactos del virus en los sistemas de salud.
El trabajo en red fue fundamental.
Recién se había confirmado el primer caso de SARS-CoV-2 en América Latina, el 26 de febrero de 2020 en Brasil, cuando la mayoría de los países de la región comenzaron a decretar la cuarentena. De manera paralela, diferentes instancias internacionales encendieron la alarma con la que advertían que el aislamiento conllevaría a un posible aumento de casos de violencia de género.
Esa preocupación detonó esta investigación.
Dos jóvenes periodistas, Nicole Martin, de Argentina, y Carlos Mayorga, de Colombia, fueron quienes sin nunca antes haber conversado comenzaron a indagar sobre las cifras en sus países. Las llamadas de auxilio estaban aumentando. Al ser integrantes de la Red Latinoamericana de Jóvenes Periodistas de Distintas Latitudes —una iniciativa para identificar, formar e impulsar talento joven en toda la región— propusieron una investigación que mostrara una visión regional de una problemática que aún sin pandemia es latente.
Así se articuló un equipo de 30 periodistas de América Latina y el Caribe, en su mayoría integrantes de la Red LATAM e integrantes de Chicas Poderosas. Además de 17 ilustradoras. Todes trabajando en red, ad honorem.
El objetivo: contar cómo eran las legislaciones de los países con respecto a la violencia de género, cómo los Estados habían reaccionado ante la emergencia, las acciones que implementaron, cómo se estaba presentando el aumento en las cifras de llamadas de auxilio, las denuncias y el número de feminicidios.
El resultado de un mes de trabajo fue la publicación —el 30 de abril de 2020— de un micrositio con un reportaje panorámico de la región que incluía opiniones de expertas sobre las posibles soluciones estructurales a la problemática, cuatro visualizaciones de datos y 19 artículos periodísticos de la situación de cada país investigado, y un banco de testimonios para que anónimamente las mujeres que así lo desearan compartieran su historia. La investigación fue retomada en 15 medios en México, Colombia, Argentina, Cuba, El Salvador, Guatemala y Paraguay.
Los retos fueron diversos: estandarizar los datos; el acceso a información pública en plena cuarentena cuando todo estaba cerrado; establecer contacto con organizaciones de la sociedad civil, que estaban en la primera línea auxiliando; los mismos periodistas estábamos en aislamiento y, lo más importante, no revictimizar a las mujeres que, quizá, en ese momento estaban atravesando por la violencia machista.
Pero debíamos adentrarnos más.
Nació así la segunda parte de esta investigación. Donde decidimos ampliar y profundizar en los datos sobre las llamadas, denuncias y número de feminicidios para los primeros cuatro meses de cuarentena —de marzo a junio de 2020— en cada uno de los 19 países investigados, en el período justo antes de que algunos de los gobiernos latinoamericanos empezaran a flexibilizar las medidas de aislamiento social.
Realizamos solicitudes de información —no obtuvimos respuesta de todo— y contrastamos los datos con los proporcionados por las organizaciones de la sociedad civil. Analizar la violencia contra las mujeres a partir de patrones se volvió indispensable para poder explicar y examinar las políticas de los Estados.
También realizamos entrevistas a organismos internacionales como ONU Mujeres y el Comité de Expertas del Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará (MESECVI) de la OEA, entre otros, para tener una mirada regional de la situación y poder detectar las fallas y los aciertos de los gobiernos. Violentadas en Cuarentena busca ser un referente de consulta del panorama latinoamericano sobre la violencia contra las mujeres durante la pandemia de covid-19, una investigación que, consideramos, podemor ir retroalimentando, porque ante un escenario tan adverso nada garantiza que en un futuro cercano no nos encontremos de nuevo encerrades en casa.
Asimismo, en recuerdo de todas las víctimas de violencia machista, seleccionamos con criterio feminista regional e interseccional seis historias para incluir perfiles de mujeres que fueron asesinadas en el primer mes de cuarentena. Además, elaboramos un memorial en homenaje a las 361 mujeres que fueron víctimas de feminicidio durante el primer mes exacto de cuarentena en cada uno de los 19 países latinoamericanos que investigamos. Como una forma de documentar quiénes eran.
Para esta nueva fase de Violentadas en Cuarentena el equipo se amplió, incluimos factchekers, para poder verificar las bases de datos de los casos de feminicidios —que en su gran mayoría fueron construidas a través de monitoreo de medios de comunicación—; también traductores para poder ofrecer los contenidos centrales en inglés y portugués, y así hacer la investigación global y poder incluir a Brasil, que algunas veces por el idioma no es incluido en investigaciones regionales; además de periodistas de análisis que contribuyeron, junto a las realizadoras de video, a la creación de piezas audiovisuales explicativas. Esta vez se buscó financiamiento y se ganó el Fondo Howard G. Buffett para Mujeres Periodistas de la International Women’s Media Foundation (IWMF) para poder pagar los honorarios de quienes desde julio a octubre estuvimos dedicados a esta investigación.
Así, Violentadas en Cuarentena nos obligó a quedarnos en casa, a adentrarnos en los entramados de la violencia contra las mujeres. A ocupar ese tiempo de mirar hacia adentro para contar y visibilizar la violencia machista que requiere acciones, aún en medio de una crisis sanitaria mundial.